Un hombre del Tao

Un estudiante una vez preguntó: “¿Cual es la diferencia entre un Hombre del Tao y un hombre pequeño?”

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El maestro le respondió: “Es simple.

Cuando el hombre pequeño se vuelve un estudiante, no puede esperar para correr a su casa y gritarlo a todos a todo pulmón.

Cuando oiga las palabras del maestro, subirá a los techos de las casas y lo gritará a la gente. Cuando aprenda las enseñanzas del maestro, desfilará por el pueblo diciéndoles a todos acerca de su nuevo conocimiento”.
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“Cuando el Hombre del Tao se vuelve un estudiante, en gratitud hará

una reverencia con la cabeza.

Cuando escuche las palabras del maestro, hará una reverencia con la cabeza y con los hombros. Cuando aprenda las enseñanzas del maestro, hará una reverencia hasta la cintura, y caminará calladamente a lo largo de la pared para que la gente no lo vea o lo note”.

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"El que habla no sabe, porque el que sabe no habla"