Procedentes
originalmente de la ciudad de Frankfurt,
eran simples salchichas de cerdo servidas en un pan de bollo y regaladas al
público que asistia a las coronaciones imperiales. En el siglo XIX varios
inmigrantes alemanes decidieron introducir este popular plato en América desde
donde evolucionó para convertirse en la salchicha procesada que conocemos hoy.
Los
perritos baratos están altamente procesados y hay poco en ellos que pueda
mejorar nuestra salud", explica Charlie Powel, miembro del lobby
alimentario Sustain. "Si se comen de forma regular no son buenos para el
consumidor. Se trata de uno de los alimentos menos naturales que uno pueda
imaginar", añade este experto en alimentación saludable.Los perritos más baratos no solo tienen un sabor desagradable ya que si se comen en exceso pueden ser desastrosas para la salud. Hay evidencias científicas de que los hot-dogs, como todas las carnes procesadas, aumentan el riesgo de cáncer de colon.
La Fundación Mundial de Investigación contra el Cáncer recomienda que la gente evite todas las carnes procesadas, o al menos disminuir el consumo, de bacon, jamón y salchichas."Si todo el mundo comiera menos de 70 gr a la semana (2 perritos calientes) podría suponer 4.000 casos menos de cáncer de colon en el Reino Unido cada año", afirma la directora de la Fundación, Rachel Thompson.
La carne es procesada y manipulada mecanicamente una y otra vez.
¿Cómo
se hacen? Se preparan en grandes cubas de metal, donde
toneladas de recortes de cerdo se mezclan con la pulpa rosa que se forma cuando
las carcasas de pollo son estrujadas a través de ralladores metálicos y chorros
de agua a presión. Los recortes de cerdo se extraen de lo que sobra de la
preparación del bacon, chuletas y el jamón, mezclados con pollo o pavo.
La
papilla que sale de esas cubas de metal se mezcla con conservantes en polvo,
aromatizantes y colorantes. Esa pasta se sumerje en agua antes de ser
introducida en tubos de plástico para ser cocinada y envasada. Un proceso
desagradable que, tras la crisis de las vacas locas de los 90, está prohibido
para la ternera, pero permitido para el cerdo y las aves, siendo la carne que
se produce con este sistema diez veces más barata que la carne normal.
Quizás
lo más sorprendente es que no hay nada particularmente insano en este producto
y que está aprobado por la Agencia Americana de Alimentación, pero sin embargo
bajo los criterios de la UE no se puede clasificar como carne y debe ser
etiquetada como recuperada mecánicamente. ¿El resto de ingredientes?
Agua, almidón, sal, proteínas de la leche, nitrato de sodio, trifosfato de
sodio y potasio, polifosfatos, ascorbato de sodio, ácido carmínico...Un cóctel
de aromatizantes, conservantes y colorantes que no aportan ningún nutriente
sino que tienen un efecto estabilizador, actuando como emulsionantes; es decir,
que sirven para dar textura, consistencia, volumen y color a la pasta rosa de
la salchicha.
Si
se comen en exceso, los efectos secundarios de estos productos químicos no son
ninguna tontería: desde alergias, dolores de
cabeza y deshidratación
a un alto riesgo de sufrir hipertensión, derrame cerebral y enfermedades del
corazón.En los niños el daño es aún mayor, ya que la excesiva cantidad de sal aumenta el riesgo de padecer la enfermedad de los huesos de cristal, asma, cáncer de estómago y obesidad. ¿Volverías a comerte un perrito después de saber esto?
1 comentario:
BUENA INFORMACION, SALUDOS.
Publicar un comentario